Miocardiopatía Hipertrófica: Fisiopatología

Causas y Mecanismos

La Miocardiopatía Hipertrófica (MCH) es principalmente una enfermedad genética autosómica dominante, causada por variantes patogénicas en genes sarcoméricos, siendo MYH7 y MYBPC3 los más frecuentes1. En algunos casos, también pueden estar implicados genes no sarcoméricos.

Las mutaciones afectan a proteínas clave del sarcómero, como la β-miosina y la proteína C de unión a miosina, alterando el ciclo de puentes cruzados actina-miosina. Esto provoca un aumento de la contractilidad y una alteración de la relajación diastólica, favoreciendo la hipertrofia ventricular y rigidez miocárdica2.

Principales mecanismos fisiopatológicos:

Las variaciones patogénicas en genes del sarcómero provocan disfunción en las proteínas involucradas en la contracción muscular. Las proteínas mutadas, alteran la dinámica de los puentes cruzados actina-miosina, generando hipercontractilidad, mayor consumo de energía y la rigidez miocárdica1,2.

Esta es la característica estructural de la MCH, con un engrosamiento de las paredes del ventrículo izquierdo que es predominante en el septo interventricular, y que limita la relajación diastólica y la expansión ventricular, afectando la función de llenado3.

La obstrucción del TSVI se debe al contacto anormal entre el velo anterior de la válvula mitral y el septo engrosado durante la sístole, generando un gradiente de presión y flujo turbulento4. Este fenómeno, conocido como movimiento sistólico anterior (SAM) de la válvula mitral, empeora los síntomas y el pronóstico4.

A pesar de la ausencia de enfermedad coronaria obstructiva, la demanda elevada de oxígeno, la compresión de arterias intramiocárdicas y la presencia de trayectos coronarios intramiocárdicos generan isquemia, que puede manifestarse como dolor torácico2.

La hipertrofia ventricular y la rigidez miocárdica provocan un aumento en la presión telediastólica del VI, elevando la presión en la aurícula izquierda y la circulación pulmonar, favoreciendo la aparición de síntomas como disnea3,5.

La fibrosis miocárdica y la desorganización del tejido crean un entorno proarrítmico, predisponiendo a arritmias ventriculares y aumentando el riesgo de muerte súbita, especialmente en jóvenes con hipertrofia severa y antecedentes familiares de MSC2.

Referencias:
1. Marian AJ. Molecular Genetic Basis of Hypertrophic Cardiomyopathy. Circ Res. 2021 May 14;128(10):1533–53. 2. Marian AJ, Braunwald E. Hypertrophic cardiomyopathy: Genetics, pathogenesis, clinical manifestations, diagnosis, and therapy. Circ Res. 2017 Sep 1;121(7):749–70. 3. Maron BJ. Clinical Course and Management of Hypertrophic Cardiomyopathy. New England Journal of Medicine. 2018 Aug 16;379(7):655–68. 4. Maron MS, Olivotto I, Zenovich AG, Link MS, Pandian NG, Kuvin JT, et al. Hypertrophic cardiomyopathy is predominantly a disease of left ventricular outflow tract obstruction. Circulation. 2006 Nov;114(21):2232–9. 5. Maron BJ, Desai MY, Nishimura RA, Spirito P, Rakowski H, Towbin JA, et al. Diagnosis and Evaluation of Hypertrophic Cardiomyopathy: JACC State-of-the-Art Review. Vol. 79, Journal of the American College of Cardiology. Elsevier Inc.; 2022. p. 372–89.

CV-ES-2500038